martes, 13 de marzo de 2012

¡De pata negra, de pata negra, nosotros somos de pata negra!. Copiad esto, Chinos.







     Una gloriosa mañana de un inedito abril, entre soleados campos de manzanos rojos y rosas silvestres al carmín, precipitó una extraordinaria nevada que cubrió el panorama visual con un sabor medio nata, medio fresa. Al vasco lugar, un artista lugareño con la sangre primaveralmente alterada, acudió presto para prendarse mentalmente del maravilloso contraste natural rojiblanco y poder utilizarlo a posteriori, como musa filtrada por su maravillosa percepción de creativo art nouveau, en ardides de diseño textil, trasladando, ese producto propiamente reflexivo cual bandera alegórica del fútbol chic pop, hasta el cumplimiento de un trabajo demandado, alegre pero arrinconado, que yacía en la mesa de su experimental despacho desde una visita anteproyecto de directivos del Athletic club de Bilbao... Me gustaría pensar que así fue parida la camiseta "kétchup" del Atlhetic, pero en realidad, no era ni siquiera por la mañana, era por la noche, el artista había sufrido un día de estrés inhumano que había estado intentando calmar con excesos de alcohol, lo cual hizo que su inicial pequeño sufrimiento en silencio, desembocara en un ataque de hemorroides palpitantes del tamaño de monedas de dos euros y unos picores extremos que convirtieron el día, en una interminable desazón de rasca y sigue buscando. El creativo se moría de ganas por ponerse el traje de los sueños y meterse en la cama, cuando una llamada telefónica interrumpió sus prisas por finiquitar la jornada... eran directivos del Athletic que le llamaron a deshoras para meterle prisa por el asunto del pedido de una camiseta genial para el club. El pintor, colgó el móvil de las pesambres maldiciendo "¡este día nunca acabará, putabizitza!" y prosiguió con el ritual pijamero cabreado por la vida y su difícil transcurrir. Se desprendió con ira de los zapatos, la camisa voló hasta donde la fuerza de la crispación pudo llevarla y el pantalón, casi arrancado, choco bruscamente con la pared de enfrente. Sin embargo, al retirar su blanca muda, un dolor de despego recorrió todo su cuerpo y comprendió, que aquello de la descarnada picacera no resultaría en vano y pasaría a ser un tema que debería abordarse con finura y delicadeza, al margen de los alterantes gajes del oficio, pues las consecuencias, estaban a flor de piel en tándem con el algodón. Poniendo dedo índice y pulgar derecho en el extremo de la pata diestra del albino calzón y haciendo simétrica captura con la parte izquierda de la prenda, deslizó sobre sus piernas ese ultimo eslabón del vestir, mientras las hemorroidales costrillas llovían al suelo como céntimos al cambio de las monedas de dos euros. Así, concluida esta última misión, el artista se sentó en la cama absorto unos minutos mirando fijamente aquella prenda que en medio del frío suelo, parecía tener un sabor rojiblanco, medio nata, medio fresa... ¡Así nació la idea! ¡oh si!.


     La original camisa se retiró, con un solo uso y en un partido amistoso, pero no se retiró por no ser de buen gusto, o porque a los aficionados no les satisficiera y quisieran lapidar al padre de la criatura o porque pareciera una equipación diseñada bajo efectos del virus "T", para el equipo de fútbol de la corporación Umbrella, en una hipotética última entrega de Resident Evil, no no no no, si no, por que el diseño original venia con leggins verdes, chanclas de bison y unos madroños con cascabeles por muñequeras, y al no sentirse respetado el artista en todo su conjunto, retiró todas las camisetas como escarmiento al populacho.


     Año de la paranoia creativa: Primavera de 2004. Equipo: Athletic Club de Bilbao.

viernes, 2 de marzo de 2012

¡yiiiiiijaaaaa!. Flecos, I'm lovin' it!



     ¡Yiiiiiiiijjjaaaaa! ¡ouuuu yeahhhhh! ¡Macaulay Culkin! ¡Red alert, caution Americanada!. Dios retraso la llegada de las cámaras de fotos a color, porque la sociedad no esta preparada para tener en el recuerdo gráfico cromático, a un pavo con esta camiseta a todo color y jugando al fútbol todo junto. Queda claro en la foto, que los jugadores contrarios se tiraban al suelo sin ser derribados por adversarios, solo para poder ver en perspectiva de escorzo esos flecazos ondeando al viento. Este equipo creó un hito en la época, al ser el primer club que se negó a llevarse la mano al corazón cuando sonaba el himno de su país, ellos eran hombres genuinamente americanos y lo que hacían cuando estaban en fila, frente al público, era sacar cada uno un hula-hoop y moviendo cintura y moda al son de "bandera estrellada" saludaban a los aficionados con sonrisas de delincuentes juveniles y barbudos. Los percances fueron varios, en los periplos de esta camiseta hubo jugadores muertos al enredarse como delfines en las redes de unas fatídicas porterías que no entendían de buen gusto, laceraciones en la parte alta de la cintura debido al fustigamiento continuo propiciado por la torsión del tronco y por el esfuerzo futbolístico e irritaciones constantes concebidas tras la acumulación de sudor, al no poder libremente transcurrir este y quedar retenido en la que los propios futbolistas dieron en llamar "esa antihigiénica franja pelua". Cuenta una leyenda, aún hoy muy conocida en Colorado, que los jugadores todavía están en un rincón del vestuario reponiendo su verguenza y que los pocos que sobrevivieron, nunca más han vuelto a ver la luz del sol.

     Año peluo: 1978. Equipo: Colorado Caribous, comúnmente conocidos como los "Golcowboys".

!tu lo que quieres, es que te coma el tigre!



     Bueno, bueno, bueno, bueno, esta vez nos dirigimos a Inglaterra, en concreto hasta Yorkshire, y claro esta, si la ciudad tiene nombre de perro, ¿que podemos esperar de las camisetas del club?. Al contrario de lo que pueda parecer, esta ciudad no ha sido arrasada por ninguna catástrofe nuclear, megamaremoto, ni por un Godzilla antediluviano herido, para que sus habitantes tengan que jugar fútbol con pieles de tigre de Bengala recién cazado. Ni siquiera "Bonus" es la empresa que explota las pinturas rupestres de Atapuerca, además, solo duraron publicitándose en el club, una temporada, exactamente en la que les gastaron esa broma que podéis ver en la foto, después, tan solo una tal "Pepis" ha tenido huevos a patrocinarlos. Hasta Marti, el chico de regreso al futuro, con todo lo que lleva vivido, se habría arrancado los pelos de las narices escandalizado aun a pensar de que esta guisa la hubiera visto en los años 80 y el que vistiera así fuera un proxeneta camello bailando reggae navaja en mano en una discoteca afroamericana. Se conoce al presidente del Hull City Fc como precursor de la frase ¡oh my god!. Se dieron hechos inéditos como el festejar los goles tirando la camiseta al público, y que esta volviera a la cabeza del jugador, arropando un ladrillo y en décimas de segundo, u otros casos, como tener que jugar siempre con camisetas nuevas porque en la lavandería se las cargaban intentando quitarle las manchas; varias lavanderias quebraron. Solo se vendieron tres camisetas, recientemente y tras años de largas investigaciones se han podido localizar las tres, una en la casa de Sara Montiel, otra dentro de una jaula en un zoo con una montaña de pienso acumulado al lado y otra dentro de una olla caníbal en la Polinesia, lo que ademas reabre el caso del futbolista ingles perdido hace veinte años.

     Año: 1.992 d.c. Equipo: Hull City fc, que debe significar, la ciudad de los burros, pues solo se conocen dos Hull, este equipo y la masa.

Bouchum, ¡viva la gente sin prejuicios!


     Bochum, una ciudad APACIBLEMENTE alemana del norte de Westfalia, apenas conocida por ser el mayor exportador de higos bochumberos y por como son capaces de transformar viriles Alemanes deportistas de 1.95 metros de altura, en julays de cuarto oscuro. Apacible, hasta que llego la empresa de loterías Faber, con su logotipo multicolor digno de una bandera pirata del mar de chueca. La mezcla, explosiva. En cuestión de días esta cuquiselección consiguió dar la vuelta al mundo en pos de la igualdad y la ambiguedad, dispararon las ventas de loterías y apuestas del pescado hasta dar por culo a la competencia, cambiaron el viejo autobús del club por una flamante carroza con margaritas multicolores, con la cual abren orgullosos todos los años la "loveparade". Conocidos como el Dream pink team su efervescencia bujarra duro poco, diversas discusiones del vestuario sobre vestuario, llevaron al traste el buen bollo del equipo, salian al campo sin calentar por la estopa que finamente se propinaban en los camerinos, continuas perdidas de aceite e incluso una huelga, que duraría media temporada, para poder cambiar los tacos por plataformas, hasta el entrenador Orchen Bon Kulin, conocido como OBK, dimitió ateniéndose a una cláusula de conciencia, harto de la progresiva transformación de su uniforme de campo, chaqueta y corbata, por vestido drag y largas pestañas.
     
     Año del pastel: 1.995. Equipo VFL Buchum.

El fin, no justifica los medios



     ¡México lindo!. Tierra de cultura milenaria, tierra de patrimonios varios de la humanidad y tierra del ¡PEYOTE!. Esta planta conocida por sus alcaloides psicoactivos con grandes cantidades de mescalina, fue sin duda el plato principal servido en el almuerzo que reunió, al portero de la selección de México, el señor Jorge Campos, con la sección de marketing de la firma deportiva. Dicha reunión tuvo lugar en un McDonald´s de México D.F. famoso porque los camareros que te sirven son los antiguos payasos de Micolor dopados. Aquel día un aparentemente inocente disco de grandes éxitos de "Onda Vaselina y Parchís greatest hits" sonaba de fondo mientras en las pantallas del local de comida rápida, emitían una exquisita selección sesentera, de capítulos de Batman & Robin...¡Crashh! ¡Pownnn!, tras un matinal de sesión continua del Chapulin Colorado, contando en la negociación también con su astucia y claro, todo se mezclo. No se puede juzgar a la ligera sin conocer que ese fue el contexto. Dos teorías científicas avalan el buen gusto del guardameta, una apunta a que los delanteros antes de chutar pueden perder los papeles, literalmente deslumbrados, y la segunda teoría apunta a que si eres un portero cejimuchojunto como Campos, la gente al ver tu foto, no se da cuenta a no ser que el bloguero lo indique expresamente.


     Años del desastre estético: Los 90. Equipo que permitió, auspició, propagó, y después despidió al entrenador porque le achacaron los malos resultados, aunque él, siempre mantuvo que fue el empacho de glamour: Selección de México.